John Travolta ha protagonizado los momentos más destacados en el segundo día del Festival de San Sebastián. Travolta presentará en el Zinemaldia su último filme, 'Salvajes', un filme "de cinco estrellas", según el actor. En la jornada de este sábado, también brilló la presencia de Oliver Stone, director de la película, y Benicio del Toro, protagonista.

El protagonista de títulos como 'Grease' o 'Pulp Fiction' fue recibido con gritos entusiastas y chaquetas de cuero esperando autógrafos. Travolta recibirá el premio Donostia a toda su carrera.

Otra de las estrellas que aterrizó este sábado en el Zinemaldia fue Ben Affleck, quien presentó su tercera película como director, "Argo", basada en una historia real ocurrida durante la crisis de los rehenes de Irán y con la que rinde tributo a los diplomáticos.

Superviviente de Hollywood

Ídolo de adolescentes en los 70, John Travolta es un ejemplo de supervivencia en Hollywood, meca del cine que encumbra a sus estrellas con la misma facilidad que las entierra.

El joven Travolta saltó rápidamente a la fama. ´Carrie´, de Brian de Palma, fue su primer papel importante. Pero fue ´Fiebre del sábado noche´ (inolvidable su composición del chulo Tony Manero, que le supuso su primera nominación al Oscar) y posteriormente ´Grease´, los films que le convirtieron en el actor de moda en los 70.

Posteriormente repetiría con De Palma en ´Impacto´ y protagonizó la secuela de ´Fiebre del sábado noche´: ´Staying Alive´, un fiasco en toda regla dirigido por el mismísimo Sylvester Stallone. Y entonces llegó la caída.

Trabajos anodinos como las dos entregas de ´Mira quién habla´ o ´Boris y Natasha´ desenfocaron por completo la carrera de Travolta. Tuvo que ser Quentin Tarantino el que salió al rescate del actor.

El deslenguado cineasta se empeñó en que el más adecuado para el papel del matón Vincent Vega era un Travolta en horas bajas, quien cobró una simbólica cantidad por un papel que le perseguirá, para bien, el resto de sus días (nominación al Oscar incluida).