La actriz estadounidense Lindsay Lohan pasará tres meses en un centro de rehabilitación para evitar entrar en prisión, una situación que no le resulta nueva, ya que la joven estrella de 26 años acumula un amplio historial delictivo que la ha llevado a pasar por la cárcel. Además, Lohan tendrá que recibir terapia psicológica y realizará trabajos para la comunidad. En esta ocasión Lindsay Lohan se enfrentaba a ser condenada por incumplir su libertad incondicional tras mentir a la Policía en un accidente de tráfico que sufrió año pasado, cuando su Porsche se estrelló contra un camión y ella negó ir al volante del vehículo. En ese momento la actriz se encontraba en libertad condicional por un robo en una joyería. Lohan ha aceptado los hechos reconociendo, así, que era ella la que conducía el deportivo y, por lo tanto, infringió también la libertad condicional.

Sus problemas con el alcohol y las drogas, sus desajustes alimenticios y su afición por conducir borracha y robar artículos de lujo han convertido a esta 'niña prodigio' en una delincuente que colecciona fichas policiales. Siendo aún menor de edad, la protagonista de 'Freak Friday, ya acudía a terapias de desintoxicación, pero parece que su empeño no fue suficiente y sus adicciones siguen trayéndole problemas. En agosto de 2007 la actriz se declaró culpable de cinco cargos por conducir borracha y posesión de drogas. En los años siguientes, Lohan fue acusada de dos atropellos y de robar un abrigo de visón, y en 2010 ingresó en prisión por violar su libertad condicional, de la que hacía y hace caso omiso.

La lista de 'niños prodigio' que han terminado como 'juguetes rotos' en Hollywood suma y sigue. Robert Downey Jr., que debutó a los cinco años, es otro de ellos. El protagonista de títulos domo 'Iron Man' y 'Sherlock Holmes: juego de sombras' vivió una infancia dura, su padre era drogadicto y le invitó a fumar marihuana con seis años. Después llegó la adicción al alcohol y a otras drogas. En 1996 fue arrestado por conducir con exceso de velocidad y en posesión de marihuana, cocaína, heroína y crack. En su coche llevaba una pistola cargada. Tras pagar una fianza quedó en libertad, pero fue detenido otra vez por entrar en casa de su vecina. Tras este suceso entró en un centro de desintoxicación, pero se fugó por una ventana.

En 1999 fue condenado a once meses de prisión. Tras ese incidente fue sentenciado a tres años de pruebas en los que debía hacerse exámenes de drogas, pero esquivó los controles médicos y volvió a la cárcel. Tras quedar en libertad, le ofrecieron un papel en 'Ally McBeal', pero antes de terminar la primera temporada fue arrestado.

Macaulay Culkin

Macaulay Culkin, el niño prodigio de 'Sólo en casa' se ha convertido en un hombre esquelético, cargado de problemas con las drogas y el alcohol. Con sólo diez años encandiló a los espectadores. Culkin logró cobrar ocho millones de dólares por película cuando no era más que un niño, pero luego fracasó con su carrera cinematográfica de adulto. Las peleas de sus padres, que siempre estuvieron más preocupados de la herencia de su hijo que de su bienestar, tampoco han ayudado a mantener en pie a este 'niño prodigio', que ahora pasea por Nueva York con la mirada perdida. En 2004 fue detenido por posesión de marihuana y otras sustancias. En el juicio se declaró culpable, y sus abogados acordaron una suspensión de la condena a un año de cárcel a cambio de asumir los hechos. Su último papel fue en 'Sex and breakfast', que sólo se estrenó en vídeo.

Drew Barrymore, la "niña de E. T.", vivió una infancia y una adolescencia en las que abusó del consumo de drogas y alcohol, y en dos ocasiones estuvo ingresada para rehabilitarse. Ella misma ha confesado que con nueve años ya se drogaba y a los doce ingresó en el primer centro de rehabilitación. "En el centro de desintoxicación era infeliz la mayoría del tiempo; me aislaba mucho. Sin embargo, con el tiempo vi que era una forma de volver a nacer, de volver a vivir otra vez", explica la actriz. La lista sigue con nombres como las gemelas Olsen: Mary Kate y Ashley, famosas casi desde que eran bebés por la serie 'Padres forzosos', sus padres acabaron enfrentados por la fortuna de sus hijas, mientras que estas acabaron sufriendo desórdenes alimenticios y adicciones a la heroína, que parecen ya superadas.

Una larga lista

River Phoenix no sobrevivió al éxito. Saltó a la fama con 15 años y fue nominado a un Oscar. Tuvo una infancia horrible, ya que creció dentro de la secta religiosa Niños de Dios, muy cuestionada por su trato a los niños y sobre la que planea la sombra de la explotación sexual de menores. A los 23 años Phoenix apareció muerto víctima de una sobredosis. Su cuerpo dijo "basta".

La lista es aún más larga e incluye desde nombres legendarios como Judy Garland o Natalie Wood a Tatum O'Neal, Edward Furlong -el joven John Connor de 'Terminator 2'- o Haley Joel Osment.