Naturaleza, fuentes, vistas espectaculares€ en la comarca del Comtat, al norte de la provincia, se encuentra Agres, un pequeño municipio de unos 560 habitantes con mucho que ofrecer. Aunque su extensión es reducida, su ubicación junto al Parque Natural de la Sierra Mariola y sus bellos rincones lo convierten en un pueblo digno de visitar: empezando por su santuario y terminando por la «Cava Gran», sin olvidarnos de sus curiosas calles pintadas.

Si por algo destaca el municipio es por la cantidad y calidad de sus aguas; de hecho, es sorprendente el número de fuentes en uso que hay cada pocos metros: La Font del Mig, La Fonteta, La Font de Barxeta, La Font del Raval, La Font de L'Assut y la Font del Convent, entre muchas otras fuera del casco urbano, y cada una distinta a la anterior. Por eso recomendamos hacer la «ruta de las fuentes» y probar un sorbito de agua de cada una de ellas.

En relación con el agua, una vez en Agres también es imprescindible visitar el lavadero público: un lugar de «reunión» donde antiguamente los agresanos acudían a lavar la ropa. Se trata de una de las albercas públicas mejor conservadas de la zona y se encuentra en un enclave de gran belleza como es la plaza del Azud. Lo sorprendente es que todavía sigue en uso y hoy en día muchas personas del pueblo lo utilizan para lavar algunas prendas.

Pero sin duda, uno de los rincones más espectaculares es el Santuario de la Mare de Deu (o Santuario de la Virgen del Castillo) un lugar para respirar aire puro, con unas vistas del municipio imponentes y donde contemplar la naturaleza de Sierra Mariola desde las alturas con un ascenso lleno de árboles, cuevas y merenderos. Un templo construido sobre los restos de un antiguo castillo al sur de la población y que lleva siendo un importante centro de devoción desde finales del siglo XV.

Otros lugares de interés son la Torre Atalaya, torre de vigilancia de origen musulmán declarada Bien de Interés Cultural en 1985 y la «Cava Gran» que, ubicada a más de 1.000 metros de altura, también goza de una muy buena panorámica. Se trata de un pozo de nieve o «nevero» que data del siglo XVII y es uno de los más grandes y en mejor estado de conservación de la zona con una forma hexagonal muy curiosa y que está habilitado para visitar.

Y si pasar el día se te queda corto y te apetece un fin de semana en la naturaleza, Agres es el lugar perfecto, ya que cuenta con un gran número de alojamientos y casas rurales para disfrutar de su entorno. Un municipio hecho para desconectar y vivirlo con los cinco sentidos.