Basado en el principio de los fluidos de Arquimides, el globo aerostático es una aeronave que asciende gracias a que el gas que contiene es más ligero que el aire. Además, como no tiene ningún tipo de propulsor, se deja llevar por las corrientes de aire, aunque hay algunos tipos que pueden controlar su elevación.

El sueño de volar

El sueño de volarSi los primeros vuelos en globo aerostático se realizaron en Francia a finales del siglo XVIII de la mano de los hermanos Montgolfier, en la actualidad podemos encontrar algunas propuestas para vivir esta experiencia única que permite surcar los cielos alicantinos disfrutando de unas vistas extraordinarias.

En las primeras horas de la mañana, por concentrar las mejores condiciones para un vuelo tranquilo, se empieza por extender la enorme tela del globo y poner en marcha un gran ventilador que, poco a poco, lo va hinchando, adquiriendo su forma característica de una gran pompa. Por último, el aire caliente que sueltan los quemadores que lleva la cesta en su parte superior será el que nos permita ascender y ganar altura.

Comienza el trayecto en el globo aerostático de la empresa Aeroglobo de Elche. Los primeros momentos en que el globo inicia el ascenso son únicos, empieza la aventura. Personas, casas, árboles, todo se va haciendo pequeño y nuestro horizonte se hace inmenso. Rodeados de nubes, mirar hacia abajo es todo un reto. ¿A qué altura estamos? 700 metros y subiendo señala el piloto (joven pero sobradamente preparado). Si las condiciones meteorológicas lo permiten, el globo puede alzarse hasta los 1.000 metros, aunque también resulta emocionante hacerlo rozando las copas de los árboles que casi se pueden tocar con la mano.

Todo es tranquilo y sereno, el globo se desplaza lentamente empujado por la suave brisa mostrando un asombroso paisaje de la Vega Baja del Segura, las salinas de Santa Pola y Torrevieja y el Parque Natural de los humedales de El Hondo.

Los minutos parecen segundos disfrutando de esta magnífica experiencia y llega el momento de aterrizar, otro momento de expectación y que requiere de la colaboración de todos. Una vez en tierra, con vertiginosa rapidez se desinfla el globo, se pliega y se recoge.

Terminar la experiencia brindando con cava es una tradición que deben respetar los que realizan su primer vuelo.

Una experiencia única

Una experiencia única

  • Preparar el globo, el montaje de la nave conlleva desplegar la amplia tela y colocar la cesta o barquilla en la que se viaja.
  • Inflar el globo, toda una experiencia ver como un gran ventilador va llenando y dando forma a esta enorme pompa.
  • Aire caliente, cuando está lleno, se ponen en marcha los quemadores que calientan ese aire que, al tener menos densidad que el de fuera, hacen ascender el globo.
  • Arriba, todo listo para que, tras subir a la cesta, se inicie un lento y sereno ascenso. Espectacular momento para disfrutar de los maravillosos paisajes que ofrece el sur de la provincia de Alicante.
  • Grandiosidad y paz, un impresionante cielo nos rodea y parece que estemos paseando entre nubes. El silencio que se vive allá arriba transmite una grandiosa sensación de paz y libertad.