Pedro Sánchez ha visitado en la noche de este lunes ´El Hormiguero´, el programa de Antena 3 que conduce Pablo Motos. Ahí ha compartido un momento de paréntesis dentro de la campaña electoral que se está desarrollando. Sánchez no ha eludido las preguntas de ´Trancas y Barrancas´ y ha mostrado su vertiente más divertida en un espacio que ya había visitado en anteriores ocasiones.

Durante uno de los momentos del programa, el líder socialista ha recordado su pasado como aficionado al ´break dance´. "Fui ´breaker´ cuando era joven y el ´moon walk´ no se me daba mal´, la ha dicho a Pablo Motos cuando este le ha propuesto improvisar el gesto que inmortalizó Michael Jackson. Eso sí, ambos lo han hecho sentados, y moviendo únicamente los brazos.

Además, el candidato del PSOE, ha revelado que a pesar de sus tiras y aflojas con la presidenta andaluza, Susana Díaz, se iría de fiesta con ella porque "tiene su punto". "Me he tomado alguna cerveza con ella y tiene su punto", ha confesado Sánchez, con tono desenfadado.

A Sánchez se le han planteado más situaciones para que decidiera a quién escoger entre diversas personalidades. Al presidente del Gobierno en funciones, Mariano Rajoy, le contaría sus problemas, mientras que al líder de Podemos, Pablo Iglesias, no le dejaría las llaves de su casa.

"Mi abuelo me dijo: uno no se puede fiar de aquel que reniega de sus raíces", ha contestado el candidato socialista al preguntarle si Iglesias era una persona fiable. No obstante, para jugar al baloncesto en parejas, Sánchez sí elegiría a Iglesias, ya que comparten afición por este deporte, en vez de a Rajoy y al presidente de Ciudadanos, Albert Rivera, con quien preferiría abrir un negocio.

Con el rey Felipe VI, el líder del PSOE compartiría casa, "porque sería el piso más grande", y para hacer "puenting", optaría por la canciller alemana, Angela Merkel, para que le pusiera la cuerda porque "es una mujer para fiarse de ella". "Me parece una mujer de palabra y que se toma las cosas en serio", la ha elogiado Sánchez pese a las críticas que siempre le ha hecho por su política económica austera.

En relación con la campaña, Sánchez ha confesado que a pesar de los numerosos actos y de los miles de kilómetros recorridos, el cariño de la gente le supone un estímulo. "Cuando me piden hacerse un selfi conmigo, me hago uno, dos, tres, veinte mil, los besos y los abrazos que sean, porque, al final, me cargan las pilas", ha admitido.

Sánchez se ha mostrado partidario de prohibir la prostitución y perseguir a los proxenetas y de abrir un debate sobre si habría que legalizar o no las drogas blandas. En materia de pactos, ha vuelto a rechazar cualquier apoyo para que Rajoy sea reelegido y tras subrayar que la alternativa es el PSOE, ha reiterado que "tenderá la mano" a Ciudadanos y Podemos para intentar un gobierno de cambio.

Sánchez ha desvelado que de sus principales rivales el 26 de junio, solo Rivera le ha mandado un mensaje para solidarizarse por el vídeo con el que algunos le ha tildado de racista por limpiarse la mano después de saludar a unos niños negros.