Sara Carbonero vuelve a casa... a trabajar. La conocida presentadora ha realizado un viaje relámpago a la capital para amadrinar la presentación de la nueva línea de productos. La esposa de Iker Casillas ha aprovechado para hablar de su vida en Oporto junto al consagrado futbolista y sus dos hijos, Martín y Lucas. Asimismo aprovechó para desmentir que 'se encuentre aislada' en la ciudad portuguesa y que estaría presionando al que fuera guardameta del Real Madrid para emigrar.

PREGUNTA: ¿Cómo está siendo la nueva temporada en Oporto?

S.C: Está siendo más tranquila, por la experiencia que ya tenemos. Tenemos nuestro hogar, nuestra gente, estamos más adaptados porque no hemos hecho toda la carrera como el verano pasado. Estamos muy felices y tranquilos con Madrid muy cerca.

P: Vienes mucho a Madrid, ¿te planteas volver dentro de unos años?

S.C: Nadie sabe lo que va a estar haciendo de aquí a cinco años. Nuestro futuro no inmediato está en Madrid. Por los niños estoy más contenta, aunque nosotros hemos ganado en tranquilidad y el proyecto común es más fácil llevarlo a cabo porque tenemos menos distracciones.

P: ¿Estás feliz, a gusto?

S.C: Sí, estoy muy a gusto en Oporto.

P: Se ha publicado que 'estás sola y aislada en Oporto y estarías presionando a Iker para volver a España', ¿Qué hay de cierto?

S.C: Es que si hacemos caso de titulares, me parece 'sola y aislada' parece una telenovela o un drama. Estamos fenomenal, normal con nuestro días, pero nada más lejos de la realidad. Gracias a Dios tenemos un grupo de amigos, los compañeros de Iker, sus familias, hacemos muchos planes y estamos muy bien. No hay nada malo y hay que buscar algo extraño.

P: Es de las veces que te vemos más feliz.

S.C: Sí, puede ser. Cuando vengo, disfruto más estos momentos. Antes tenía el día a día en Madrid. Me vuelvo a ahora a Oporto y venir a Madrid lo saboreo más. También estoy más mayor y tengo dos peques.

P: ¿Tienes nuevos proyectos?

S.C: Tengo alguna cosita, sigo con Ágatha, diseñando para ellos; tengo mi proyectos de blog; sigo con la fábrica cerca de Oporto para que supervise las colecciones. No me queda tiempo para mucho más.