El ex piloto de motocilismo y DJ Fonsi Nieto es uno de los diez primeros concursantes de 'MasterChef Celebrity', que llegará a las pantallas de La 1 la próxima semana, aunque todavía no se ha desvelado la fecha exacta de su estreno.

El deportista madrileño, que el año que viene contraerá matrimonio con Marta Castro en Ibiza, asegura que es una de las experiencias más duras y gratificantes que ha vivido y que se lanzó a la piscina culinaria, en gran parte, porque su hijo, Lucas, es un fan del formato original.

¿Qué ha sido lo más complicado de esta experiencia?

He pinchado a 600 kilómetros de Madrid, he vuelto a Madrid sin dormir, me he metido en el programa y creo que lo más difícil para mí era el pilotito rojo, el tema de la televisión, las horas. Los actores están más acostumbrados a todo eso y para mí eso ha sido lo más difícil. Soy muy cabezón y me pasaba de horas, el programa y el curso. Creo que lo mejor hubiera sido mejor dar menos clases y llegar al programa despierto porque me quedaba dormido de pie.

Decías en la rueda de prensa que fuiste tú el que llamó. ¿Qué es lo que te llevó a dar el paso?

Me enteré que estaban interesados en mí. Yo tenía amistad con Macarena Rey (productora de Shine Iberia) desde hace muchos años por otro tipo de cosas (hizo el documental de mi tío, tenemos muchos amigos en común). Me han llamado de veinte mil programas de televisión y siempre fue un 'no' rotundo, ni entrar en detalle. Pero este programa gusta a todo el mundo, lo puedes ver con tu hijo, con tu abuelo, con toda la familia, es en una cadena que es bastante blanca y que no te va a meter en ningún conflicto.

Dices que has dicho no a muchas propuestas, ¿después de este programa abrirías la puerta a otro formato?

Es que no veo ninguno en el que yo me sienta identificado. En este sí, porque es un programa de superación, de reto, de dar todo... Es en el único programa en el que me veo.

¿Qué es lo que más te ha sorprendido de ti?

Lo que más me ha gustado es que sigo siendo fiel a mis principios. Quizá lo he tenido más difícil, al igual que otros compañeros porque al final está compitiendo. Los actores se mueven muy bien en el mundo de la televisión, están acostumbrados a rodajes de muchas horas, a dar juego en cámara, creo que eso es una parte muy importante de este programa, además de cocinar. Yo cuando me veáis contento es que así lo siento y cuando llore será por lo mismo.

¿Ha sido tan duro?

Mucho más de lo que se dice.

¿Ha habido buen rollo entre vosotros?

Claro que sí, tenemos un chat y te puedo asegurar que no me reía tanto desde hacía mucho tiempo. Ha habido días que hasta los cámaras se enfadaban con nosotros por los ataques de risa que nos daban a todos. Pero ha habido momentos duros, de enfadarnos entre nosotros.

Una de las cosas que más agobia es el reloj. ¿Te ha pasado?

Justo para mí ha sido lo más fácil porque llevo toda la vida mirando y analizando cronos, en las pruebas era el que les avisaba del tiempo. Le tenía cogido el truco. Ha habido anécdotas de todo tipo. Para mí lo más duro son las horas que tienes que echar en televisión.

Al final, ¿crees que ha ganado el mejor?

Siempre que alguien gana algo es porque lo merece. Aquí no hay trampa ni cartón, ni más una cosa así que son tantas horas. El que ha ganado es el mejor concursante, eso desde luego, aunque no sé si el mejor cocinero. Hay gente que no tenía ni idea, como yo, hay gente que ya sabía. Aquí se ha valorado mucho la evolución, eso ha sido una parte muy importante.

¿Tenías un plato estrella?

Sí, claro, lo típico. En Ibiza, con los amigos haces un arroz, una fideuá, una pasta. Creo que todos tenemos un plato que lo has hecho 20 veces y te sale de puta madre, pero es que aquí no eliges nada ni sabes nada. No es que te den un solomillo, es que te dan la vaca entera para que saques el solomillo, ahí es cuando se complica porque te das cuenta que no tienes ni idea.

¿Lo veías con tu hijo?

Sí, a mí hijo le encanta y le hacía mucha ilusión. A mí también porque de lo contrario, no hubiera entrado.

En casa, ¿quién cocina, Marta o tú?

Los dos hacemos mucho, pero es que yo me paso la vida fuera de casa. Desde chiquitín estoy acostumbrado a comer en hoteles, restaurantes, aviones, aeropuertos...

Ahora, ¿te piden que cocines más?

Desde que hemos acabado no he vuelto a cocinar prácticamente nada. Tengo que asimilar todo. Prefiero irme a restaurante y criticar (risas).

¿Por qué has decidido dar el paso del matrimonio con Marta?

Soy muy impulsivo y las cosas las hago cuando me apetecen. Siempre me habéis preguntado y yo os decía que no era el momento. Pero, de repente, este verano hemos pasado mucho tiempo separados porque yo he tenido montonazo de trabajo. Creo que he dormido en la misma cama solo seis noches, ha sido un verano durísimo. Cuando echas de menos algo es cuando te das cuenta el valor que tiene. Ese ha sido el puntito que me ha hecho dar el paso.

¿La cuenta atrás para la boda cómo la llevas?

Bien, contento, imagínate con un follón que no veas. Ahora tengo que ver cómo hago el catering para que los tres jurados no me pongan a parir.

¿Te estás implicando mucho en los preparativos?

Sí, a mí me gusta.

¿Tenéis elegido el sitio del banquete?

Será en Ibiza, pero no es fácil encontrar un sitio en el día que tú quieres y entonces prefiero esperar a contar más cuando lo tenga más cerrado.

¿Alba estará invitada?

Sí, claro que sí.

¿Qué tal se ha tomado el peque la noticia de la boda?

La verdad es que es muy pequeño y no entiende de qué se trata, pero él me ve a mí feliz y poco más necesita.

Participará de alguna manera especial

Él tendrá su papel, seguro, pero es un niño. Él hará lo que quiera y con lo que se sienta a gusto.

¿Cómo habéis celebrado el cumple de Lucas?

Bueno, imagínate, súper divertido. Muy ilusionados porque son cinco añitos.

¿Le has regalado un casco?

Le hacía ilusión tener una réplica. En casa tengo un museo y siempre está preguntándome y sé que le hacía ilusión. La gente que hacía mis cascos cuando corría han tenido el detalle de hacer uno para él. Aunque antes de que me lo preguntes ya te digo que no tengo ninguna gana de que quiera montar en moto, ni nada. Le montó en los cars y en casa le hablamos poco de carreras. Procuramos que juegue al fútbol y a otras cosas.

Pero es inevitable en tu familia que el tema esté patente.

Vamos intentar alargarlo todo lo que podamos.

¿Le has llevado a algún circuito?

Le he llevado un par de veces. Al final, tu vida ha sido eso, tu familia ha sido eso... lo ve, pero tratamos de que en casa no lo vea.

¿Se parece a ti? ¿En qué?

Sí, en que es muy cabezota, cuando quiere algo hasta que no lo consigue, no para. Pero es muy buen niño, estamos súper contentos.