Última batalla de 'La Voz', una gala donde afloraron una vez más los nervios y las emociones. Era mucho lo que se jugaban los participantes, sin posibilidad de robos, pero tras una semana de ensayos complicados, con muchos ajustes por parte de los mentores, todos dieron lo mejor en el ring musical. Una noche compleja para los 'coaches', que decidieron qué tres miembros de sus equipos pasaban a los directos y esquivaban el último asalto, que Telecinco programará el próximo miércoles.
Pero dejando a un lado las actuaciones, la noche estuvo repleta de detalles, como las prometidas gambitas de Huelva que Manuel Carrasco se comprometió a llevar en las audiciones y que Alejandro Sanz reclamó desde el arranque del programa. El marisco se hizo esperar hasta la última batalla, la de Hugo y José Díaz, y hubo para las estrellas, para el público y el equipo del 'talent'. Esperaban el postre de parte de Malú, pero la madrileña fue la única que no hizo una promesa culinaria. Porque en 'La Voz', lo que se promete se cumple y en esta edición, otra cosa no, pero hay varios compromisos con los eliminados, que los mentores tendrán que consumar.
Si la semana pasada nos sorprendió con su peinado, Gloria Trevi, bautizada como 'La Fontana di Trevi', volvió a impactar con su cardado estilismo capilar, un ajustadísimo vestido blanco, con sus lágrimas y, como no, con su querencia a mojarse y mojar a sus compañeros. Manuel, prevenido, llevó un paraguas que provocó la hilaridad del público. La mexicana ha sido la más gamberra de esta segunda fase del concurso y nos recuerda un tanto a Laura Pausini por su naturalidad y desparpajo, piensen lo que piense y digan lo que digan. Por cierto, prometió al perdedor del duelo más flamenco que grabaría un tema inédito de su próximo disco, y ese honor recayó en Ezequiel.
Y hablando de pelos, Alejandro Sanz fue peinado. El músico madrileño acudió como un pincel, puede que contagiado por el cambio de estilismo que tan bien le ha sentado a Melendi. Nuestro músico más internacional no solo dio la paliza a Carrasco con las gambas, sino que nos mostró el buen rollo con su compadre, José Mercé, que ha hecho enormes avances con su inglés. Asustados estamos con el bilingüismo del maestro flamenco, cualquier día nos topamos con un 'quejío' anglosajón 'by the jerezano'.
Hubo muchos concursantes jóvenes, algunos apenas tenían 18 años y era la primera vez que actuaban en público, como Sislena, a la que le pudo la presión durante su actuación con Álex y a la que Manuel se comprometió a ayudar en sus estudios de canto; o el tímido Hugo, que se vio superado por el desparpajo de José Díez, pero que se llevó a casa la petición de Alejandro Sanz de que le mande algunos de los temas de su puño y letra para trabajar en un futuro.
Vimos también apoyando desde la zona familiar a Raquel Revuelta, madre de Claudia, parte del equipo de Melendi, que fue vencida por Belén en una interpretación nada fácil del 'Wrecking Ball' de Miley Cyrus. La modelo sevillana le robó a su hija unos segundos de la actuación, no más que los tempos que el espacio de Boomerang le dedica al resto de los familiares y amigos.
Vivimos momento anécdota como a los que nos tiene acostumbrados Lolita en 'Tu cara me suena', pero de mano de Alejandro. Tras la batalla entre Deborah y Lucía, componentes del equipo del asturiano, el músico relató la primera vez que oyó 'Empire State of Mind' de boca de su autora, Alicia Keys, que deleitó al español durante un paseo en barco por el río Hudson, en Nueva York. Pablo López aprovechó la coyuntura para pedirle el teléfono de la estrella estadounidense, pero Sanz, un tanto 'pelusilla' por el buen rollo del ayudante con su ahijada, Malú, se guardó a buen recaudo la numeración.
La batalla finalizó con 12 aspirantes que pasan directamente a los directos, que arrancarán en dos semanas, a los que se sumarán tres participantes más en siete días en un Último asalto lleno de novedades, una nueva oportunidad de demostrar ante sus coaches los artistazos que llevan dentro. Noelia, Manu y Esperanza son las grandes apuestas de Alejandro; Esmeralda, Carlos Torres y María convencieron a Carrasco; Maite, Irene Carucho y Santhi son los elegidos por Malú; mientras que Deborah, Sahra y Mario serán las grandes apuestas de Melendi.
No se vayan todavía porque en 'La Voz' queda mucho y bueno por escuchar.
