A pesar de la múltiple oferta televisiva de la que disponemos hoy en día, es fácil dejarse invadir por la nostalgia cuando a nuestra memoria acuden recuerdos de programas míticos de los años ochenta y noventa. Sus canciones, sus bromas, sus muletillas... se han quedado en nuestra retina y en nuestro lenguaje y son capaces de teletransportarnos a una feliz infancia o juventud frente al televisor.

Pero los recuerdos se distorsionan con el paso de los años y si a día de hoy comparáramos los contenidos de entonces con los de ahora, seguramente la balanza de la calidad se decantaría hacia la nueva programación. Eso no quita, que nos asalten los buenos recuerdos y hermosas sensaciones al evocar esos maravillosos espacios televisivos de los años 80 y 90.

'El precio justo'

¿Quién no se atrevió a imitar al presentador más mítico de los 80, Joaquín Prat? Haciendo una ola con la mano para invitar a alguien del público bajo la frase '¡A jugarrrr!', el presentador invitaba a todos los telespectadores a formar parte del show. Sólo se trataba de adivinar el precio de algún objeto, eso sí, siempre sin pasarse de la cifra. Se emitió en TVE de 1988 a 1993 pero las ediciones presentadas por Prat lograron regalar los premios más elevados de la historia de la televisión.

El pecho de Sabrina

¿Quién no recuerda el tremendo descuido de Sabrina en Nochevieja? La cantante italiana, que se hizo popular con su 'Boys', copó todas las miradas y comentarios del fin de año de 1987 durante su actuación en TVE en la que se le escapó un pecho de su ajustadísimo body.

El equipo A

Todos quisimos formar parte del Equipo A alguna vez. Que los planes salieran bien, como le gustaban a Hannibal, tener los puños de acero de M.A, el loco humor de Murdock o el atractivo de Fénix. Sólo oír los primeros compases de la sintonía, una oleada de energía, optimismo y ganas de acabar con los malos nos conquistaba.

La muerte de Chanquete

'Verano azul' se ha convertido en una referencia de TVE y de todos los españoles. Año tras año se ha ido repitiendo en la parrilla televisiva para hacer revivir las aventuras de verano de un grupo de amigos, niños y adolescentes, en una localidad de la Costa del Sol. Sin duda, dos de los momentos más recordados de la serie de Antonio Mercero fueron cuando a Bea le vino la menstruación por primera vez y cuando el viejo pescador Chanquete murió.

Humor amarillo

La sobremesa de los sábados a principio de los años 90 eran risas y diversión gracias a 'Humor amarillo', en la que decenas de concursantes japoneses sin miedo ni ridículo se enfrentaban a las pruebas más locas. Todo se volvía más hilarante con los comentarios de Juan Herrera Salazar y Miguel Ángel Coll que inventaron una serie de personajes recurrentes como El chino Cudeiro o Pinky-Winky, y en ocasiones otros como Dolores Conichigua.

'Las mamachicho'

Telecinco llevó a las vedettes y el espectáculo de vodevil a su programación más vista. Siguiendo una estética muy italiana, un coro de bailarinas se movían al son de la popular canción 'Mamachicho me toca". El famoso baile fue imitado en centenares de escuelas durante las horas del recreo.

Los inventos de MacGyver

Cualquier problema tenía su solución si estaba McGyver cerca. Sólo necesitaba un chicle y algún clip o mechero para lograr escapar de su trampa mortal o evitar un mal mayor... Este agente secreto cuya arma más peligrosa era su inteligencia, podía superar cualquier obstáculo con su mochila repleta de diversos objetos normales y corrientes. Un héroe querido por todos, que combinaba su parte de scout y otra parte de genio.

David el Gnomo, el amigo de los niños

David el Gnomo enseñaba a los niños a respetar la naturaleza, a querer a los animales, a ser bueno con los demás... Era un ser animado que todos los pequeños sentían como su mejor amigo. Por eso, cuando en el desenlace de la serie, el creador decidió matar a esa figura de la animación española se derramaron tantas lágrimas que se agotaron los kleenex en todas las casas.

Un, dos, tres, responda otra vez

Otro de los programas estrella de la década de los 80 fue el 'Un, dos, tres...' en el que cuatro parejas (amigos y residentes en Madrid) se enfrentaban a retos y preguntas de lo más originales. Dirigido por Chicho Ibáñez Serrador contaba con elementos emblemáticos como la calabaza Ruperta o las Tacañonas. Uno de los programas sagrados de TVE que duró hasta 10 temporadas.

"Que te pego, leches"

El último momentazo televisivo que queremos recordar es el famoso 'Que te pego, leches' que el empresario José María Ruiz-Mateos utilizó mientras atizaba al entonces presidente de Cartera Central, Miguel Boyer, en 1989. La escena centró cantidad de horas y comentarios y los programas de humor convirtieron la anécdota en su sketch estrella.