Las series televisivas han dado un salto de calidad enorme en la última década convirtiéndose en auténticas obras de arte que compiten con los grandes éxitos cinematográficos.

Hoy por hoy es habitual ver a actores y actrices de renombre en las ficciones de la pequeña pantalla, e incluso directores y guionistas de Hollywood han querido probar en este género.

Las cadenas también se han dado cuenta del tirón de las series, y muchas de ellas intentan aprovechar al máximo sus ficciones estrella creando productos derivados que buscan repetir el éxito de sus predecesoras.

En España hemos visto esta práctica tanto en Telecinco como en Antena 3. El canal de Mediaset creó la ficción ´Aída´, un spin-off de la aclamada ´Siete Vidas´ y acertó.

La serie protagonizada por Carmen Machí se ha convertido en una de las más fuertes de la parrilla y es líder de audiencias en su franja horaria.

Antena 3 hizo lo propio con ´Imperium´, secuela de ´Hispania´, y con ´Amar en tiempos revueltos´.

El canal del grupo Atresmedia se hizo con el formato de la serie de RTVE y tras cambiarle el nombre, ahora se llama "Amar es para siempre", la convirtió en la reina de las tardes.

Las cadenas estadounidenses, como siempre, son pioneras en spin-offs.

Así, series como ´Buffy cazavampiros´, ´The vampires diaries´, ´Pretty Little Liars´, ´Once upon a time´, ´Friends´, ´Navy´, ´Torchwood´ o ´Frasier´, tienen o preparan su serie derivada.

Otras ficciones como ´Sobrenatural´, ´Los Soprano´, ´Breaking Bad´ o ´Touch´ podrían también tener continuación con nuevas series.