Acercar la ópera a todos los oídos y desterrar varios de los clichés que le acompañan, sobre todo el que señala que es un arte reservado para las clases elitistas. Estos han sido algunos de los motivos que han llevado a Rubén Pacheco y Luis Castro a poner en marcha un proyecto que está a punto de materializarse. Los ilicitanos estrenarán el próximo viernes 24 de noviembre la adaptación que han hecho de la obra Bastián y Bastiana de Mozart en el gran teatro de Elche, un proyecto que luego espera salir de gira por los principales auditorios de la Comunidad Valenciana y otros territorios.

Bastián y Bastiana es la primera ópera que compuso el genio austríaco, cuando sólo contaba con 12 años. Su sencillez, no exenta de una gran calidad, permite que sea fácil de adaptar para todos los públicos. «Es una obra que se amolda tanto para el que acude a disfrutar de este género por primera vez como para el que cuenta con más experiencia», explica Pacheco, director musical de este proyecto, y también de la Orquesta Musiké Hèmera. Su compañero en la aventura, Castro, se ocupa de la parte escénica, desde su experiencia al frente del Espai Escènic d'Elx.

Pacheco sostiene que su versión de Bastián y Bastiana está repleta de arias de calidad. «Hemos abierto el abanico para todo tipo de públicos. Uno de los objetivos que nos hemos propuesto es el de descubrir la ópera para todos aquellos que se acerquen a ella por primera vez. Es algo distinto a lo que se suele ofrecer en estos espectáculos. También hemos hecho una adaptación para que los diálogos sean entendibles», añade el director musical, que resalta el hecho de que la historia de amor entre los protagonistas está «bien trazada, lejos de ser un relato cutre».

Su compañero en este proyecto respalda las ideas ofrecidas por el director de la Orquesta Musiké Hèmera. «Nuestra intención es la de quitar los prejuicios academicistas, que señalan que esto sólo es para las élites culturales. La ópera tiene mucho que ver con la interpretación, que es el género del que procedo. Es el gran arte interpretativo musical. Nosotros también apostamos por una puesta en escena potente para acercar al público», subraya un Castro que también destaca que Mozart compusiera Bastián y Bastiana con 12 años.

El proyecto que lideran los dos directores ilicitanos está compuesto en su mayoría por artistas locales. Llevan un año trabajando en una idea que subirá a cerca de treinta personas al escenario del Gran Teatro el próximo 24 de noviembre. El elenco está formado por ocho actores, catorce músicos y tres cantantes: la soprano ilicitana Carmen Muñoz, que representa el papel de Bastiana, el tenor alicantino Francisco Jiménez, que se mete en la piel de Bastián, y el bajo ilicitano José Antonio Cecilia, que interpreta al personaje del mago Colás.

Dentro de su propósito de acercar el trabajo de Mozart a todos los públicos, Pacheco y Castro ofrecerán el día 24 tres pases de su obra. Los dos primeros serán en horario matinal, a las 10 y a las 12 horas, destinados a 24 centros educativos de Elche. A las 21 horas tendrá lugar la función destina al público general, con un precio de 15 euros. «Las entradas son asequibles, por lo que cuesta acudir a una ópera habitual, en esta pueden venir tres personas», añade Castro.

Que los dos directores ilicitanos se hayan decantado por esta obra de Mozart no es algo casual, ya que son unos enamorados del talento que desprende. «Era muy joven cuando creo esta pieza artística pero ya se vislumbraba todo el potencial que contenía, no hay dudas de que con esa edad ya era un genio. No ha sido un autor que haya tenido un crecimiento durante su trayectoria, como pueda ser el caso de Beethoven, desde que era un niño ya era un genio de principio a fin», hace hincapié Pacheco.

Los autores de esta versión de Bastián y Bastiana se conocen desde hace muchos años, desde que coincidieron en el coro de su instituto. «Ha llovido demasiado desde entonces», bromean. Uno en el campo de la música y otro en el del teatro, nunca habían unido su talento para trabajar de forma conjunta. Ahora han decidido hacerlo en un proyecto que pretende acercar el arte de Mozart a todos los públicos.