El Consell lanzó ayer un mensaje directo al Gobierno central en torno al retraso que acumula la puesta en marcha el programa del turismo del Imserso, del que están pendientes los 180.000 jubilados españoles que aspiran a conseguir plaza en los 60 hoteles que trabajan este mercado en la Comunidad, el 90% en la Costa Blanca con epicentro en Benidorm. El secretario autonómico de Turismo, Francesc Colomer, aprovechó la clausura de la Mesa Nacional del Turismo de España en Madrid para exigir al Gobierno una revisión urgente del modelo del turismo subvencionado para los jubilados, en la que prime la calidad y no el precio «porque en los últimos años el programa ha descansado en el altruismo y las pérdidas del sector». Casi al mismo tiempo en que Colomer clausuraba la jornada de la Mesa Nacional del Turismo, el presidente de la Generalitat, Ximo Puig, mostraba por primera vez firmeza en la defensa de los hoteleros, al subrayar en una entrevista en Ser-Alicante, que «es intolerable que el Gobierno pague 20 euros por la estancia de los turistas del Imserso en los hoteles», para a continuación poner esta coyuntura como ejemplo para rechazar la imposición de un tasa turística. La semana que viene finaliza el plazo para presentar alegaciones. Si no hay recurso, se espera que los primeros turistas puedan llegar en la primera quincena de diciembre, pero los empresarios no tienen todavía claro cómo habrá recibido el turoperador Turismo Social quedarse con una parque menor del programa.

El secretario autonómico de Turisme reivindicó este miércoles en Madrid que «el turismo debe considerarse como tema de estado» y abogó por «cooperar y escuchar la voz del sector», una actividad que representa el 15,5% del PIB en la Comunidad Valenciana, cerca del 16% del empleo y supuso, por ejemplo, una recaudación fiscal de 3.845 millones de euros anuales en 2019. Colomer hizo hincapié en que «se debería tener más consideración a este sector, porque cuando cae el turismo, las ciudades se desploman», e insistió en que «el programa del Imserso se debe reinventar y revisar». Para el titular de Turisme «no se puede jugar a precio sin apostar por la calidad», y reconoce que «en este momento, nos preocupa el compás del programa Imserso en la Comunidad Valenciana, que en los últimos años ha descansado en el altruismo y las pérdidas del sector». Este fue su mensaje durante su intervención en la clausura de la Asamblea Ordinaria de la Mesa del Turismo de España, celebrada en Madrid y que analizó los temas actuales que atañen al sector. Durante la jornada se presentaron, además, las acciones promocionales de los próximos meses, así como el informe de coyuntura turística correspondiente al segundo trimestre de 2021.

Durante su participación en la Asamblea, Colomer señaló que aunque «este sector no fue catalogado como esencial durante la pandemia, sí es, un sector imprescindible para entender quienes somos». En este sentido, animó a los miembros de la Mesa de Turismo a «vernos todas las comunidades autónomas como un ecosistema, público, privado y social, y como un equipo de futuro, con gran capacidad para cooperar» En esta línea afirmó que «uno de los retos fundamentales, además de competir en el mundo, es la remontada reputacional, porque a partir de ahí se puede construir un relato mejor».

Al mismo tiempo aseveró que «después de lo vivido, debemos exaltar la vida y valorar el tiempo», apostando por «la hospitalidad como valor turístico imprescindible». Del mismo modo, el secretario autonómico dejó latente el trabajo en materia turística realizado en los últimos años en la Comunidad Valenciana. Colomer destacó «la arquitectura de confianza y de generosidad a la hora de compartir datos, neuronas, tecnología y visiones de futuro», que se ha generado desde Turisme y el Invat.tur de Benidorm. Para Colomer, «en la Comunidad hemos sabido construir un corpus interesante que nos ha servido de guía». En este sentido, hizo alusión al Libro Blanco de Turismo, a la Ley de Turismo, Ocio y Hospitalidad de la Generalitat Valenciana, al Código Ético adaptado a la Comunitat Valenciana, así como al trabajo realizado en materia de ODS y adaptación al cambio climático. Y todo en una semana que sigue siendo casi de temporada alta en la Costa Blanca. El buen tiempo, el turismo extranjero y la reactivación de eventos mantienen la ocupación hotelera por encima del 70% en gran parte de la provincia. La patronal Hosbec destaca que octubre «sigue evolucionando de forma positiva», con datos de ocupación hotelera que permitirán «finalizar este primer mes del otoño con un resultado mejor a la previsión inicial, que estaba muy marcada por la incertidumbre. El buen tiempo impulsa las reservas hoteleras. A ello se suma la progresiva e incesante recuperación de los mercados internacionales».