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Alicante, la ciudad de las vallas azules

Vecinos de Alicante lamentan la lentitud del Ayuntamiento en arreglar desperfectos en la vía pública, que pueden permanecer meses señalizados

Vallas en la avenida de la Estación, frente a la Diputación de Alicante, que llevan meses en la zona. JOSE NAVARRO

En la avenida de la Estación, una de las más transitadas por alicantinos (por su ubicación) y visitantes (por aquello de tener en sus extremos la estación de tren y una de las principales paradas del TRAM), hay tres vistas que forman parte de la imagen de la ciudad, aunque por diferentes motivos: la fuente de Luceros, que luce ahora en todo su esplendor tras una restauración finalizada en tiempo y forma (algo que empieza a ser noticia por poco frecuente); el Palacio provincial, sede de la Diputación y obra del mismo autor que diseñó la Casa Carbonell o la Casa de Socorro; y, por otras razones, las vallas que acordonan desde tiempos casi inmemoriales el entorno de uno de los muchos alcorques vacíos de la ciudad de Alicante. El desperfecto de la vía pública es uno de los muchos que se perimetran en la capital, con vallas azules, y así permanecen durante, semanas, e incluso meses, hasta que se acomete su reparación, entre la indignación de los vecinos de la zona que se quejan repetidamente, también en redes sociales, de la lentitud del Ayuntamiento para resolver problemas en las calles.

Vallas en el paseo central de Óscar Esplá, a la altura del cruce con la calle Castelar. | JOSE NAVARRO

Estas vallas, frente a la Diputación de Alicante y a una manzana de Luceros, se encuentran en el cruce entre la avenida de la Estación con la calle General O’Donnell, y parece que tratan de preservar el hundimiento parcial de la acera ante posibles tropiezos. Otras de esas vallas azules que tanto se ven por la ciudad se encuentran en la calle Reyes Católicos, también en pleno centro de la ciudad. Esta vez acordonan un espacio situado en el límite entre la calzada y la acera, entre las calles Pintor Aparicio y Portugal. Los vecinos desconocen el motivo.

El mismo modelo de vallas es que el limita un deterioro en la vía pública en el paseo central de la avenida Óscar Esplá, cerca del cruce con la calle Castelar. Ahí se ve, a simple vista, que se busca señalizar un hundimiento de una trapa que, parece ser según la inscripción, ocultan cableado de las señalas de tráfico de la zona. Los vecinos aseguran que ya lleva un tiempo en un espacio, sobre el papel, habilitado para la circulación de las bicicletas por el céntrico paseo peatonal.

Similares vallas azules también son visibles en el cruce de General Marvá con la calle Marqués de Molins, en las inmediaciones de la Escuela Oficial de Idiomas de Alicante. Los vecinos aseguran que están para acordonar unas piedras que cayeron hace tiempo y que aún continúan en el suelo hasta la fecha.

Otras vallas en la calles Reyes Católicos, en plena calzada. Jose Navarro

Esa lentitud en resolver los problemas ha llevado a residentes de Garbinet a advertir ya de la colocación de unas vallas en unas obras que se estaban acometiendo en la zona del Centro Cívico. «La obra se comenzó hace varias semanas en la acera de la calle Médico Vicente Reyes. Se ha dejado a medias, con el pavimento sin reponer y formando un permanente charco del desagüe del edificio», señala uno de los vecinos, que espera que la solución no se eternice. Puede que en la mente tenga las escaleras perimetradas del Mercado Central, que en los últimos años han pasado más tiempo entre vallas que en marcha, o los bajos de la pasarela del Postiguet, que tras el choque de un camión lleva casi dos años agujereada y señalizada por unos «testigos» colocados por los Bomberos de Alicante. En esa misma zona, los vecinos también esperan la reparación de varias jardineras centrales dañadas presuntamente por impactos de vehículos.

En este contexto, y según fuentes de la Concejalía de Infraestructuras, «los técnicos del Ayuntamiento de Alicante revisarán los lugares con vallas para que sean arreglados lo antes posible».

Luego, según lamentan otros alicantinos, están los desperfectos en vía pública que se señalizan con conos naranjas, pero que tampoco se solucionan con agilidad. Se refieren, entre otros muchos, a los problemas en la calzada localizados en la plaza de España, que llevan semanas marcados con conos y cintas.

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