Calificación: ** | Dirección: Stephan Gaghan. Guion: Stephen Gaghan, Dan Gregor y Doug Mand, sobre los libros de Thomas Sepherd. Fotografía:Guillermo Navarro. Música: Danny Elfman. Intérpretes: Robert Downey Jr., Antonio Banderas, Michael Sheen, Jim Broadbent, Jessie Buckely, Harry Collett, Kasia Smutniak. Duración: 101 minutos. Año: 2019. Nacionalidad: EE UU.

Una decepción en toda regla que pone de manifiesto la escasa capacidad de conexión del director Stephan Gaghan con el cine de aventuras para niños. Tanto es así que este relativo remake es inferior a la primera versión, 'El extravagante doctor Dolittle', dirigida por Richard Fleischer en 1967 pero con diseño de musical, que tampoco fue precisamente un modelo a seguir.

De este modo, las peripecias fantásticas de este peculiar veterinario que ha encontrado el sistema para poder hablar con los animales pierde toda su viabilidad y se convierte en un producto soso y a veces aburrido que no encuentra la solución para sus defectos. Gaghan, que debutó como director en 2002 con 'La desaparición de Embry' y que ha realizado cuatro largometrajes ('Syriana', 'Gold', 'La gran estafa'), parece en principio incapacitado para hacer un cine impregnado de vigor y de ritmo.

Con estos antecedentes, que podrían ampliarse con las tres secuelas, muy alejadas de los textos originales, que interpretó el actor afroamericano Eddie Murphy como protagonista, se hace palpable la poca fortuna que la literatura de Hugh Lofting ha tenido hasta ahora en la pantalla grande. Es más, la elección de Robert Downey Jr., para encarnar a Dolittle, en teoría un peso pesado de Hollywood, solo contribuye a mirar con nostalgía al Rex Harrison que le daba vida en la cinta inicial.

Con estos inconvenientes acumulados las cosas solo funcionan los primeros minutos, cuando se nos cuenta la fascinante historia de Dolittle mediante un delicioso corto de animación. Es la forma de entrar en su mundo y saber los motivos que le llevaron a dejar la civilización y aislarse con un grupo de animales a los que enseñará a expresarse con el lenguaje humano. La realidad es que no pudo superar siete años atrás la muerte de su novia, optando por cambiar radicalmente de compañía. Pero una vez puestos al tanto de todo esto, la cinta no da más de sí. En fin, lo que podríamos definir como un revés de entidad.