La sucesión sigue siendo uno de los mayores retos a los que se enfrentan las empresas familiares, además, sin distinción de fronteras. Una realidad de la que cada vez son más conscientes todas las administraciones, incluida la Comisión Europea, que ha financiado un proyecto de colaboración para poner en marcha una plataforma de aprendizaje con la que facilitar información y herramientas a los empresarios para poder realizar esta transición con éxito.
Una iniciativa -bautizada como Sufabu- que ha reunido a organizaciones de seis países europeos -República Checa, Bélgica, Italia, Noruega, Reino Unido y España- y que en nuestro país ha estado liderada por la consultora On Projects, con la que ahora va a colaborar también la alicantina Peláez Consulting en su fase final.
En concreto, Javier y Enrique Peláez van a participar en la conferencia final del proyecto que se celebrará de forma online el próximo 14 de octubre en la doble vertiente de expertos en la materia y también para contar el caso de la constructora Ecisa, que fundó su padre, Manuel Peláez Castillo. Una jornada en la que también participarán representantes de distintas asociaciones de empresa familiar, como la madrileña Adefam; o del mundo académico, como el responsable de la cátedra de empresa familiar de la Universidad de Cádiz, Daniel Lorenzo; y donde se verán otros casos de éxito, como los de la firma Gancedo.
Pero, además, la consultora alicantina también se está encargando de revisar los contenidos de la plataforma, que quedarán a partir de ahora en internet a disposición de cualquier empresario que quiera tener una primera aproximación a las herramientas y la información que se ha recopilado, según explica Javier Peláez. «Lo que pretende el proyecto es hacer accesible toda esta información a cualquier empresario familiar que se encuentre en esta situación», señala Javier Peláez.
Al respecto, Peláez señala que una de las cosas que han apreciado al colaborar en este proyecto es que el problema de la sucesión en este tipo de compañías «es universal, se da en todos los países, aunque haya algunas diferencias culturales», por ejemplo, en la participación de los cónyuges en este proceso sucesorio. Además, también ha puesto de relieve la falta de una definición legal de lo que es una empresa familiar, que le otorgue algún tipo de protección. Algo que sólo se da, según explica Peláez, en República Checa.
Aunque la mayor parte de esta información se puede conseguir acudiendo a alguna asociación, el objetivo es que esté al alcance de todos los empresarios de forma fácil y accesible en internet.
