OPERACIONES

Los analistas creen que BBVA presentará una contraoferta por el Sabadell

Algunos, como Renta 4, piensan directamente que la operación no saldrá adelante

La sede del BBVA en Madrid.

La sede del BBVA en Madrid. / José Luis Roca

Celia López, Paula Blanco

Una semana después de la oferta presentada por el BBVA, al cierre de mercado de este lunes el Sabadell rechazó categóricamente la fusión por absorción "no solicitada, indicativa y condicionada" porque entiende que "infravalora significativamente" su proyecto y sus perspectivas de crecimiento. Ahora la pelota está en la entidad bancaria capitaneada por Carlos Torres. Hay tres caminos por los que puede transitar el BBVA a partir de ahora: desestimar la operación una vez más tras el fracaso de 2020, recurrir a una oferta pública de adquisición (OPA) hostil o presentar una contraoferta. Los analistas optan por esta última opción porque una OPA hostil no fructificaría y creen que el BBVA todavía tiene un as guardado bajo la manga.

"Creemos que podríamos ver una contraoferta desde BBVA, pero veo poco probable que empiecen a lanzar una OPA", explica el analista de Norbolsa, Ane Roa. Coincide el director de gestión de inversión colectiva de Link Securities, Juan J. Fernández-Figares: "Estoy seguro de que tienen un plan B, ya que la respuesta inicial del Sabadell no creo que les haya sorprendido". Y ese plan B podría ser un nuevo acercamiento. Según 'Expansión', Citi estima que la posición de capital de BBVA "le deja espacio para mejorar su oferta añadiendo dinero en metálico". En concreto, sumarían un 10% de la operación en efectivo (0,2 euros por acción o 1.100 millones de euros). La oferta rechazada por el Sabadell era de 2,26 euros por acción y una prima de alrededor del 30%.

Para que la operación se pusiera en marcha de nuevo, BBVA deberá preparar una oferta que convenza tanto al Sabadell como a los inversores. Uno de los flecos sueltos es saber qué ocurrirá con la filial británica de la entidad bancaria presidida por Josep Oliu, TSB, al que se añadiría el posible coste de romper las alianzas del banco en seguros, gestión de activos y medios de pago, algo que costaría alrededor de 1.1000 millones de euros, según los cálculos de Citi. En este nuevo paso juega un papel fundamental el Banco Central Europeo (BCE) por querer ejercer un mayor control en la banca y tener mayor concentración de los mismos. Por otra parte, la OPA hostil está descartada porque, según el analista de IG, Diego Morín, "podría acarear en mayores 'riesgos' para la entidad, pudiendo alcanzar una prima entre el 40-45%". Desde Renta 4 ven difícil una continuación de la operación: "Del comunicado se interpreta la falta de predisposición a entablar conversaciones en un caso hipotético en el que BBVA pudiera estar dispuesto a mejorar las condiciones de la oferta. En este sentido, no vemos margen para una mejora del precio de modo que el impacto sobre BPA pueda seguir siendo acretivo y justifique la ampliación de capital", exponen.

Crecer de forma orgánica

En un comunicado interno enviado a la plantilla del Sabadell el lunes por la noche, tras el rechazo del consejo a la oferta de compra del BBVA, Oliu reiteró que la propuesta "no es satisfactoria para los intereses de la entidad ni para sus accionistas". "Tenemos una gran confianza en la marcha del banco y en los planes que se están ejecutando", declaró y animó a los miembros del consejo a "continuar con el mismo compromiso y profesionalidad" que han demostrado en los últimos días. Estas palabras ponen de manifiesto la confianza de la alta dirección del Sabadell en su plan estratégico, "que pasa por seguir creciendo de forma orgánica y, probablemente, por también hacerlo mediante adquisiciones", señala Fernández-Figares. Así, la operación del BBVA, rechazada hace cuatro años por el precio y la distribución del poder, es contraria a este plan.

"El banco está creciendo a buen ritmo, mejorando mucho su rentabilidad. No veo por qué no puede seguir creando valor para el accionista como entidad independiente", añade. En sus últimas cuentas presentadas, relativas al periodo comprendido entre enero y marzo de 2024, se reflejó esta buena marcha. El banco ganó 308 millones de euros, un 50,4% más que el año anterior, elevó su rentabilidad que espera obtener en el año a más del 12% y prevé superar en el conjunto del ejercicio los 1.332 millones de euros que obtuvo el año pasado, el mayor beneficio desde su fundación en 1881. "La situación macroeconómica actual le va a aportar en la generación de ingresos gracias al reprecio de la cartera", recuerda Roa.