Información

Información

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Las almazaras de Elche: En busca de la rentabilidad

Proponen adoptar nuevos sistemas de plantación de olivos en terrenos más amplios para abaratar el coste de producción de las cosechas y hacer frente a los bajos precios

Aceite elaborado con oliva cultivada en el Camp d'Elx, que durante estas semanas se elabora en las almazaras. antonio amorós

El descenso del precio del aceite debido a la sobreproducción también afecta a los cultivos ilicitanos, como advierten desde las almazaras del Camp d'Elx, donde, para hacer frente a esta situación, proponen a los agricultores cambiar la mentalidad y acabar con las pequeñas plantaciones que requieren de mucha mano de obra. Por contra, los expertos apuestan por plantar olivos en mayores extensiones de terreno cultivable en los que sea posible adoptar un modelo que permite, en condiciones óptimas, realizar la recolección de 400 olivos al día.

Este proyecto lo lanzaron de forma conjunta en Elche las almazaras de El Tendre y Candela hace unos años, con la intención de mejorar las condiciones del cultivo de olivos, y acabar con uno de sus principales problemas, que es la alta dependencia de la mano de obra, y ahora se considera que es más importante que nunca fomentar su implantación, para hacer frente a los bajos precios con los que los productores de aceite se están encontrando en los mercados tanto nacionales como internacionales.

Desde la Almazara de El Tendre, Joaquín Sempere, apuntó que «en la actualidad el mercado está roto, y el nivel de rentabilidad de los cultivos sigue bajando, ya que el consumo de aceite no aumenta al mismo ritmo que lo hace la producción».

En el Camp d'Elx, donde hay tres almazaras, se esperan recoger durante esta campaña 1,5 millones de kilos de oliva, que en su mayor parte se destinan a la producción de aceite. Este año coincide, además, con el de mayor producción, ya que los olivos dan de forma alterna un año una producción abundante, y otro menos cosecha, pese a que durante los últimos años se haya tratado de apostar por variedades que son poco veceras, como son la frantojo, genovesa y arbequina.

Sin embargo, el aumento de producción global que se viene registrando año tras año en el sector hace que desde las almazaras insistan en la necesidad de acabar con «los minifundios», que son las pequeñas fincas en las que resulta más complicado obtener beneficios de la producción.

Así y todo, el olivo sigue siendo a día de hoy un cultivo recomendado para esta zona, ya que es muy resistente a la sequía, al necesitar solo tres riegos anuales. Además, explicó Joaquín Sempere, «se trata de un cultivo que requiere muy pocos cuidados, por eso se puede contabilizar con otras ocupaciones».

Cuidados

Los expertos también indican que el olivo necesita de una poda de control adaptada al método de recolección, que aseguran que es un proceso sencillo si se realiza desde el momento de la plantación. De hecho, las características con las que crece el árbol marcan que en un futuro puedan emplearse sistemas modernos de recolección que abaraten la inversión necesaria.

Además lo idóneo, explicó Joaquín Sempere, «es que el árbol tenga un solo pie, y que la altura de la cruz esté a 1,25 metros». Esto, sumando al esquema de plantación que proponen desde las almazaras ilicitanas, que es de 7 por 5, a modo de 5 de oros, es lo que facilita la recolección mecanizada con paraguas.

Siguiendo todas estas instrucciones, destacan desde las almazaras El Tendre y Candela, se puede mejorar la rentabilidad de los cultivos de aceitunas, ya que así se puede abaratar el coste de la producción hasta en un 80% , que repercute tradicionalmente en la mano de obra necesaria para recoger las olivas. «Si abaratamos el coste de producción, podremos jugar con mejor ventaja a la hora de hacer frente a problemas con el descenso de los precios», destacaron desde el Camp d'Elx.

Lo último en INF+

Compartir el artículo

stats