Existen diversas tradiciones culinarias en nuestra dieta a las que recurrimos con frecuencia y las cuales, sin saberlo, dañan nuestro organismo. Hay algunas combinaciones de alimentos sin las que no contemplamos nuestros menús diarios, sin embargo éstas no son nada beneficiosas para nuestra salud.

Para evitar esos daños y aprovechar al máximo los beneficios que nos aportan los alimentos que ingerimos, es necesario conocer bien sus propiedades y efectos de los mismos sobre nuestra salud. Por eso, apunta las siguientes combinaciones de alimentos a evitar.

Evita el azúcar y las grasas

Estamos ante una combinación que se convierte en una bomba de relojería al ser ingerida. El azúcar es un componente fácil de digerir que, al unirlo con las grasas retrasa el proceso digestivo. Un ejemplo de esta combinación la encontramos, por ejemplo, en los yogures con sabores frutales. Para evitarla puedes optar por yogures naturales a los que puedes añadirle una cucharada de miel para edulcorarlos.

Evita el azúcar con el pan

Uno de los desayunos más degustados son las tostadas con mermelada. Pues bien, esa combinación de alimentos no es la mejor para iniciar el día con buen pie. Los almidones del pan bloquean el paso del azúcar por el estómago. Esta alteración viene porque estamos mezclando nutrientes que se digieren de manera muy diferente.

Evita las proteínas con el almidón

La pasta con pollo o con carne picada es uno de los platos estrella de muchas dietas. A pesar de su rico sabor y atractivo no se puede describir como una combinación saludable. El hecho es que son dos nutrientes que ralentizan el proceso de digestión, produciendo flatulencia.

Evita mezclar dos proteínas

No mezcles diferentes pescados o diferentes carnes en un mismo plato. Esta concentración de proteínas será muy difícil de descomponer por tu organismo y te hará gastar una cantidad de energía en balde.

Evita las proteínas con los carbohidratos

Consumir a la vez este tipo de alimentos te puede producir indigestión. Por eso, la típica combinación de carne con patatas, a pesar de ser muy atractiva, supone un esfuerzo extra para nuestro aparato digestivo.