El PSOE sigue negociando con sus socios parlamentarios de investidura pero también con Ciudadanos el decreto de reforma laboral cuyo debate de convalidación está previsto para el 3 de febrero y de momento tanto los socialistas como Unidas Podemos son optimistas con unos y con otros.

El Gobierno ha dejado claro que el decreto debe convalidarse sin abrir la vía de las enmiendas y que "no contempla otro escenario", y mientras la portavoz del Ejecutivo, Isabel Rodríguez, ha vuelto a reclamar el apoyo de todos, el dirigente socialista en el Congreso, Héctor Gómez, ha dicho que esta votación no es "un punto y final" en el marco de las relaciones laborales.

Gómez ha incidido en que los contactos con los partidos son diarios y que hay "muy buenas sensaciones", al tiempo que desde Podemos también se muestran optimistas para sumar los votos de ERC y PNV.

"Las negociaciones van bien, el mensaje es de optimismo y creemos que llegaremos a un acuerdo con los socios de investidura...queda mucha legislatura para seguir negociando", ha avanzado el presidente del grupo parlamentario de Unidas Podemos, Jaume Asens, que pide a ERC "que se fíe de los sindicatos".

Podemos y PSOE reiteran que la reforma laboral no debe ser el último acuerdo importante al que llegar en materia laboral.

"Esta reforma es un avance sobresaliente pero seguiremos dando pasos...somos optimistas", ha dicho Gómez al tiempo que ha confirmado que algunos partidos ya han manifestado su voluntad de apoyar.

En este sentido Ciudadanos se mantiene en el sí a la reforma laboral sin cambios y confía en que esta semana el ministro de la Presidencia, Félix Bolaños, se ponga en contacto con su partido para "confirmar" que cuenta con los votos necesarios para que no sea tramitada como proyecto de ley.

"Pedimos seriedad"

"Al Gobierno le pedimos seriedad. No se puede llegar a la votación final con la lengua fuera", ha incidido el portavoz adjunto de Cs en el Congreso, Edmundo Bal, en rueda de prensa.

Sin embargo, los socialistas siguen intentando sumar en la ecuación a sus socios de investidura, a ERC y a PNV, y mientras al PNV le recuerdan que en España hay más convenios provinciales que autonómicos, a ERC le señalan la importancia de otras leyes que quedan por venir al Parlamento.

Además, para Podemos un giro a la derecha podría hacer que "las confianzas queden tocadas" en un futuro.

Sin embargo, fuentes de ERC inciden en que "seguimos donde estábamos" y señalan a EFE que como partido de izquierdas no pueden aceptar un "mero maquillaje" de la reforma laboral del PP.

ERC recuerda que en 2012 salieron a las calles en una huelga laboral "contra el ataque del PP a los derechos laborales y hoy nosotros seguimos defendiendo lo mismo, y lamentamos que otros estén más preocupados por perder la CEOE que por blindar los derechos laborales".

JxCAT ha avanzado, por su parte, que no apoyará la convalidación del decreto porque en su opinión implica excluir al 98 % de los trabajadores y empresarios catalanes y ha incidido en que es un "parche" y "blanquea la reforma del PP con mínimos cambios".

"Nosotros defendemos sin complejos los convenios catalanes por encima de los estatales", ha puntualizado la portavoz de JxCAT en el Congreso Miriam Nogueras.

En este ámbito de los convenios autonómicos, el presidente del PNV, Andoni Ortuzar, ha pedido este martes "un poco de imaginación y flexibilidad" para hallar alguna fórmula con la que asumir el planteamiento del grupo nacionalista, y que la reforma laboral sea votada por los socios "habituales" de Pedro Sánchez.

Ortuzar ha insistido en la prevalencia de los convenios autonómicos, aunque si finalmente se llega a un acuerdo fuera del decreto sobre este asunto, Ciudadanos podría salirse de la ecuación de los votos favorables.

Bildu tampoco ve avances ni la intención del Ejecutivo de "modificar ni una coma" y junto a la Cup suman los noes que recibirá el decreto ya que recriminan que da más "centralidad".

Movilizaciones

La Cup y Bildu acudirán a las movilizaciones convocadas para el próximo fin de semana (29 y 30 de enero) y la portavoz de la Cup en el Congreso, Mireia Vehí, ha acusado a los sindicatos y a Podemos de "no plantar cara".

Por otra parte, el Ejecutivo sí parece contar con los apoyos de grupos minoritarios como el Partido Regionalista de Cantabria (PRC), cuyo diputado José María Mazón ha confirmado este martes su voto favorable, mientras que Compromís ha dicho que no harán "descarrilar" el decreto porque lo ven un avance aunque sea pequeño.

El diputado valenciano Joan Baldoví ha pedido al Gobierno que se comprometa por escrito y en sede parlamentaria a hacer cambios a lo largo de la legislatura en materias como los despidos o los cambios en las condiciones laborales.

"Preferimos avanzar un paso pequeño a que no se avance nada", ha puntualizado Baldoví que también ha instado al Ejecutivo a "que deje de hacer guiños a Ciudadanos" y "mire a la mayoría que le ha permitido" sacar adelante leyes como los presupuestos o los decretos que este martes también serán convalidados en el pleno del Congreso.

Lo que es seguro es que PP y Vox votarán en contra porque la reforma no generará empleo y repercutirá en la salida de la crisis económica.