El boniato, también conocido como batata o camote, es un tubérculo de gran popularidad en diversas gastronomías del mundo. Su sabor dulce y textura suave lo hacen un ingrediente versátil tanto en recetas dulces como saladas. Pero, ¿qué lo hace tan especial desde el punto de vista nutricional y cómo se compara con la patata, otro tubérculo muy consumido?
El boniato es un tubérculo que crece bajo tierra, perteneciente a la familia Convolvulaceae. A diferencia de la patata, que pertenece a la familia de las solanáceas, el boniato tiene una textura más cremosa y un sabor más dulce. Existen diversas variedades, con colores que van desde el blanco y amarillo hasta el naranja y morado, cada uno con sus propias características.
Este tubérculo es una fuente excelente de varios nutrientes esenciales:
- Vitaminas. El boniato es particularmente rico en vitamina A (en forma de betacaroteno), especialmente en las variedades de carne naranja. También aporta vitaminas del grupo B, vitamina C y vitamina E.
- Minerales. Aporta minerales como el potasio, magnesio, hierro y manganeso.
- Fibra. Contiene una buena cantidad de fibra, beneficiosa para la salud digestiva.
- Antioxidantes. Los boniatos morados son especialmente ricos en antioxidantes, como antocianinas, que contribuyen a la prevención de enfermedades.
- Bajo índice glucémico. A pesar de su sabor dulce, el boniato tiene un índice glucémico más bajo que las patatas, lo que lo hace más adecuado para personas con diabetes o para controlar los niveles de azúcar en sangre.
Al compararlo con la patata, el boniato presenta tanto ventajas como desventajas. El boniato gana en términos de contenido de vitaminas A y C, así como en antioxidantes. Las patatas, por otro lado, ofrecen más vitamina K y hierro.
El boniato tiene un índice glucémico más bajo, lo cual es una ventaja para el control de azúcar en la sangre. Ambos tubérculos son buenas fuentes de fibra, pero el boniato tiene una ligera ventaja. El boniato es ligeramente más alto en calorías y carbohidratos que la patata mientras que la patata es conocida por su gran versatilidad en la cocina, el boniato también es sumamente adaptable a diferentes tipos de recetas, aunque su sabor dulce puede no ser preferido en ciertos platos.
Por último, el boniato tiende a ser más húmedo y dulce, mientras que la patata ofrece una textura más seca y un sabor neutro, lo que puede ser preferible en ciertas preparaciones.
La tortilla “dulce” de boniato
Esta original tortilla la hemos encontrado en el Instagram de la nutricionista Blanca García-Orea, que cuenta con más de 1,1 seguidores en esta red social, y se trata de una alternativa la mar de original para la tradicional tortilla de patata de toda la vida. Porque si usamos patata… ¿por qué no boniato?.
Para preparar esta tortilla de boniato necesitarás los siguientes ingredientes:
- 1 boniato
- 3-4 huevos
- 1 puerro o calabacín
- Aceite de oliva y sal
Para prepararla no tendrás que complicarte mucho ya que se elabora como una tortilla de patatas al uso. Estos son los pasos que debes seguir y que nos explica @blancanutri:
Pela el boniato con un pelador y haz láminas finas. Corta el puerro también.
Pon aceite en una sartén y cocina el puerro y el boniato a fuego medio. Tápalo para que se cueza mejor.
Cuando veas que tiene una textura blandita (alrededor de unos 15 minutos después) colócalo en una fuente en la que hayas batido previamente los huevos. Remueve bien.
Es el momento de freír la tortilla en una sartén con un poco de aceite y ya la tienes lista para comer.
