La provincia de Alicante ofrece al turista mucho más que sol, playa y fiesta. El turismo cultural también tiene cabida en esta provincia, y entre sus maravillosos museos y centros culturales merece la pena destacar los importantes yacimientos arqueológicos allí situados.

Así, nos encontramos con la antigua ciudad de Lucentum, el Santuario del Pla de Petracos y la conocida como Illeta dels Banyets. Te presentamos uno de los mejores planes para disfrutar de una escapada o excursión perfecta en Alicante.

Lucentum

Visitar los restos arqueológicos de la antigua ciudad Alicante, conocida como Lucentum, transporta al visitante al siglo IV a.C., dentro del periodo íbero-romano. Situada en El Tossal de Manises, en el barrio de la Albufereta, es uno de los yacimientos arqueológicos más importantes de la Comunidad Valenciana y fue declarado Monumento Histórico-Artístico en 1961.

Gracias a los trabajos de restauración y conservación llevados a cabo en los últimos tiempos, se puede pasear por sus calles romanas al tiempo que se contemplan sus murallas, termas o foros.

Santuario del Pla de Petracos

El Pla de Petracos es un antiguo poblado morisco que pertenece al municipio de Castell de Castells , situado en la región de la Marina Alta. Es uno de los yacimientos de arte rupestre más importantes de la Comunidad y en el año 2005 fue declarado Parque de Interés Cultural.

Descubierto en el año 1980, se compone de un conjunto de abrigos y posee diversas masías, donde se pueden contemplar diversas pinturas rupestres con unos 8.000 años de antigüedad representativas del arte macroesquemático levantino, declaradas Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en 1998.

Illeta dels Banyets

El yacimiento arqueológico de La Isleta, también llamado Illeta dels Banyets, está situado en el término municipal de Campello, a unos 9 kilómetros de la ciudad de Alicante.

La Isleta es una antigua península que se separó de la costa alicantina tras un fuerte terremoto ocurrido en un año que se desconoce, para después volverse a unir a tierra en 1943.

Pese a no tener una gran extensión, en este yacimiento se han identificado restos de la Edad del Bronce, y diversos materiales islámicos que apuntan a una ocupación de carácter esporádico en la Época Medieval.