Afinación, empatía y buen temple son sólo algunos de los calificativos con los que se definía la demostración que realizaron ayer los 35 escolanos que participaron en la tradicional Prova de Veus. Los niños del Misteri d'Elx superaron el examen con nota y dejaron claro que están preparados para afrontar las próximas representaciones de La Festa.
Dos Cortejos, un Ángel Mayor, un Araceli y, como colofón, la Coronación fue el repertorio que el mestre de Capella, José Antonio Román Marcos, preparó con el objetivo de que todos los niños tuviesen la ocasión de demostrar ante la corporación municipal y el público, que llenó el salón de plenos del Ayuntamiento, la calidad de las voces que se escucharán en la basílica de Santa María.
El resultado, aseguró el propio mestre de Capella, al finalizar la prueba, «es que han demostrado que están preparado al cumplirse nuestras expectativas».
Lo cierto es que las dos Marías, con Manuel Abad y David Mármol y sus Cortejos, y, sobre todo, el Ángel Mayor de Javier Chinchilla dejaron el pabellón bien alto, mientras que el Araceli, con Jorge Guilabert, Pablo Sánchez, Luis Maestre y Antonio Esteve, ofreció una interpretación llena de armonía, al conseguir igualar el nivel de las cuatro voces.
La Coronación, con Manuel Abad, Francisco Penalva y, en el papel de Padre Eterno, el sacerdote Ramón Vicente Cano, terminaron de embelsar al público al que la Prova de Veus se le pasó en un respiro.
Despedida
Durante la Prova de Veus de este año sonaron un total de ocho voces nuevas. Escolanos que ocupan el lugar de aquellos que por edad van a pasar al coro juvenil. Así, al finalizar la audición, la alcaldesa, Mercedes Alonso, tuvo palabras de agradecimiento para los nueve jóvenes que ayer se despedían de las representaciones y a los que se les entregó un diploma.
La próxima cita de La Festa será el sábado, 10 de agosto, a las 18 horas en la basílica de Santa María. Allí, se llevará a cabo la Prova de l'Àngel donde que pondrá a prueba la destreza de los escolanos para cantar en los aparatos aéreos.
