Acabamos de empezar prácticamente el verano y nuestra única fijación en los ratos libres es ir a la playa. Sol, arena, el mar? lo cierto es que la Costa Blanca es un lugar ideal para perderse, pero el verano es muy largo y también hay muchos sitios desconocidos por descubrir, sobre todo en el interior de la provincia.
En la localidad de Banyeres de Mariola, que es un auténtico pulmón verde en la provincia de Alicante, y dentro del Parque Natural del mismo nombre, se encuentra lo que muchos consideran el nacimiento del río Vinalopó, un lugar donde admirar la naturaleza en todo su esplendor y darse un chapuzón en aguas dulces, frescas y cristalinas.
Este río surge de la Font de la Coveta, cuyo entorno está rodeado por diferentes pozas de agua transparente. Se trata de una zona muy transitada por excursionistas y dentro de esta pequeña cueva, el agua está tan limpia que dicen que puede beberse directamente de ella.
Pero si lo que buscas es refrescarte, te recomendamos que te acerques hasta el "Toll Blau" un oasis de pequeñas cascadas en mitad de la naturaleza con pozas donde poder bañarte tranquilamente. Y aunque no es sencillo llegar hasta allí, vamos a intentar explicarlo lo mejor posible, porque merece la pena visitarlo.
Para llegar a la Font de la Coveta, basta con partir desde el Centro de Información del Parque Natural de la Sierra Mariola, donde se pueden aparchar los coches. Se trata de una ruta corta y muy bien señalizada, de unos 4 kilómetros. En el recorrido encontrarás antiguas fábricas entre las que destaca la de la Campana y la de Blanes, siguiendo el sendero para llegar a esta última fábrica, y antes de llegar a la Font de la Coveta tomaremos un desvío de 50 metros, pasando por un pequeño puente y descendiendo, donde finalmente nos encontraremos con la poza del Toll Blau.
Recomendamos llevar calzado cómodo para andar y unos escarpines para bañarse en la poza. Si te apetece cambiar la arena y el agua salada de la playa por la naturaleza y las heladas aguas dulces, no dejes de visitar este Parque Natural, ya que además del Toll Blau, hay muchos lugares más donde disfrutar de un buen baño de paz.
