La ministra de Hacienda, María Jesús Montero, se mostró ayer receptiva a la petición del conseller de Hacienda, Vicent Soler, para que sean las autonomías las que financien, con fondos del Mecanismo de Recuperación y Resiliencia de la UE, proyectos autonómicos específicos y singulares.
El responsable de la Hacienda valenciana intervino durante la Conferencia Sectorial del Plan de Recuperación y Resiliencia, celebrada de forma telemática, ante los consejeros autonómicos (incluida una alto cargo del Gobierno catalán) y la ministra de Hacienda, para defender una especie de «Pertes autonómicos». Los Perte son proyectos estratégicos para la recuperación y transformación económica y varios consejeros apoyaron la propuesta.
La particularidad de la propuesta valenciana radica en que el Gobierno identifica para financiar los proyectos aquellos que tienen un peso específico sobre la economía de todo el país, por ejemplo el sector automovilístico.
Pero lo que reivindica el Consell es que autonomías como la valenciana puedan marcar prioridades en sectores que no tienen un gran peso en el conjunto de España, pero sí dentro de la economía valenciana, como el azulejo, la cerámica el plástico, el juguete, el textil o el calzado. Así, el Consell reivindica poder gestionar dinero para los proyectos de estos sectores específicos y singulares.
Otra de las reclamaciones valencianas es que el Gobierno clarifique los criterios y mecanismos de certificación y verificación, lo que evidencia que el reparto de los fondos europeos, y de los distintos mecanismos de recuperación, entra en un terreno complicado que muchas veces ni las propias autonomías entienden.
Modificaciones presupuestarias
También se acordó en la reunión de ayer permitir que se realicen modificaciones presupuestarias para que los fondos se puedan gastar en varios años, ya que es inviable que muchos proyectos se puedan realizar en un ejercicio. De ese modo, los remanentes de un año se podrán gastar en el siguiente. Otro de los acuerdos es que los fondos del Plan de Recuperación tendrán una traslación neutra a las cuentas de las autonomías, es decir no computarán ni para el déficit ni en el caso de obtener superávit.
Además, el dinero del mecanismo de reconstrucción y resiliencia también se podrá destinar a financiar la asistencia técnica y al pago del IVA, siempre que se cumplan unas condiciones.
También reclamó la delegación valenciana un reparto territorializado de forma que los fondos lleguen a los pequeños ayuntamientos, que no tienen la capacidad de otros más grandes. Y también que se actúe contra la despoblación y la congestión demográfica, ya que ambas afectan al territorio valenciano.
Mientras, la Generalitat ya tiene asignados unos mil millones, según aseguró recientemente en las Corts el president, Ximo Puig. En concreto, 945 del Next Generation EU para 2021 con el detalle de 483 del React y 462 del Mecanismo Europeo de Recuperación y Resiliencia, el 10,2% del total asignado por el Gobierno hasta ahora en las distintas conferencias sectoriales que ya se han celebrado. Ayer la ministra habló de 7.200 repartidos a las autonomías.
Malestar en el Consell por la actitud «destructiva» de Madrid
Reprocha las trabas del gobierno de Ayuso que contrastan con el tono de Galicia o Andalucía
La conferencia telemática entre la ministra de Hacienda y los consejeros autonómicos sobre el Mecanismo de Recuperación y Resiliencia de la UE acabó en bronca. Fuentes del Consell lamentaron la actitud «destructiva» de Madrid y señalaron que su tono nada tiene que ver con el de otras autonomías gobernadas por el PP como Galicia o Andalucía, que aunque son críticas con el Gobierno lo hacen con un tono más respetuoso. Según explican fuentes presentes, el Gobierno de Ayuso trata de prolongar la bronca de la pasada Conferencia de Presidentes a todos los espacios para desgastar al Gobierno.
Soler pide debates útiles
Durante el encuentro el conseller de Hacienda valenciano tomó la palabra para lamentar el tono de algunas afirmaciones y pidió que se dejara de lado el debate partidista para tratar de llegar a acuerdos que sean útiles y avanzar en la cogobernanza, algo que ni mucho menos está consolidado, según dijo.
Soler apeló a la necesidad de alcanzar acuerdos entre las instituciones y defendió que lo que está sobre la mesa es la gestión de unos fondos que no tienen precedentes porque no son asimilables a ninguno de los programas que se venían gestionando, por lo que reclamó un esfuerzo de todos.
Consejeros populares señalaron a Efe que salían insatisfechos de la reunión porque no hay «cogobernanza real» en la gestión de los fondos europeos y pidieron «equidad» en el reparto y «lealtad institucional».
