El pasado viernes Iker Jiménez relataba por sus redes sociales el inesperado suceso que le tocó vivir durante sus vacaciones en Tokyo, Japón. El presentador de ´Cuarto Milenio´ se encontraba con su mujer, Carmen Porter, y su hija Alma, de seis años, cuando se enteraron de que un tifón se aproximaba a la capital japonesa.

"En el momento preciso en que el aire silba con fuerza. Son las 23.55 y el tifón llega a Tokyo poco a poco", con estas palabras, el presentador abría un hilo en Twitter en el que contó la experiencia al detalle como si se tratase de uno de los espeluznantes sucesos de su programa.

Era medianoche y Jiménez tranquilizaba a sus seguidores afirmando que los cristales eran buenos y estaban fuera de peligro en el hotel en el que se alojaban él y su familia.

El periodista informó de que debían permanecer bajo techo mientras describía el panorama desde la ventana del edificio. "Yo de momento no noto nada anómalo además de la sirena cada x minutos y el viento fuerte. Y un cielo como morado oscuro".

Al día siguiente el tifón había llegado y el paisaje era otro , más gris y tormentoso. Jiménez compartía fotos desde su hotel donde se puede ver el revuelo que causó el fenómeno en los informativos de Japón.

Pero Jiménez no solo relató el suceso a la perfección sino que aprovecho el hilo y la expectación para hablar de su devoción por la cultura japonesa, y el civismo y el respeto de los ciudadanos, que respaldó con un claro ejemplo.