Nos lo han repetido cientos de veces. Una buena higiene bucodental es garantía de una mejor salud. Y no solo de nuestros dientes. También de nuestra salud general, porque la salud empieza por nuestra boca. Pese a ser un mantra en buena parte de los casos, todavía cometemos errores de principiante a la hora de cepillarnos.

El Colegio de Odontólogos y Estomatólogos de Alicante (COEA) advierte de los fallos más comunes o conocidos y de otros que no lo son tanto.

El listado de errores en el cepillado recoge 10 prácticas principales a evitar:

1- El uso de un cepillo inadecuado es muy frecuente y el problema tiene fácil solución. El profesional indicado para recomendarnos cuál es el instrumento adecuado para limpiar nuestros dientes es el dentista. Las revisiones periódicas en la clínica dental son fundamentales y nuestro odontólogo o estomatólogos es quien debe aconsejarnos sobre qué cepillo usar en cada etapa de nuestra vida.

2- Usar cerdas duras, pensando que así limpiaremos mejor la superficie de nuestros dientes es otro de los fallos más comunes. No por rascar más o con mayor fuerza vamos a mejorar nuestra higiene. Si no contamos con el consejo del profesional sanitario es preferible usar una intensidad media o suave, aunque siempre, lo mejor, es pedir el consejo a nuestro dentista.

3- Realizar una técnica incorrecta de cepillado puede ser igual a no lavarnos los dientes. Para ejercer un correcto cepillado hay que colocar el cepillo de dientes formando un ángulo de 45 grados con las encías y moverlo adelante y atrás suavemente, con movimientos cortos que cubran toda la pieza dental.

4- Cepillarse demasiado rápido es otro de los fallos más frecuentes. El cepillado debe realizarse de una forma suave, sin prisas. Lo ideal es disponer de tres minutos para realizarlo con tranquilidad y sin brusquedad.

No por rascar más o con mayor fuerza vamos a mejorar nuestra higiene

5- Ejercer demasiada fuerza al cepillarse los dientes puede causar desgaste del esmalte dental. No por presionar más fuerte el cepillo contra el diente vamos a limpiarlo mejor.

6- Olvidar algunas zonas de la dentadura o del diente es un error común. A la hora del cepillado no hay que olvidar ninguna parte del diente, desde la superficie interior a la de masticar, pasando por la exterior.

7- La higiene interdental a menudo se considera menos relevante y eso es un grave error. Tan importante como cepillar correctamente los dientes es eliminar todos los restos de comida que puedan quedar entre las piezas, por lo que es esencial utilizar el hilo dental correctamente. De hecho, según los estudios del Consejo General de Dentistas, la higiene interdental elimina un 40% más de placa. Nuestro dentista puede ayudarnos a aprender a hacerlo de la mejor manera.

Es esencial utilizar el hilo dental correctamente para eliminar todos los restos de comida

8- Empezar mojando el cepillo es otro de los fallos más cotidianos. Es mucho mejor que esté seco para arrastrar de una mejor manera la suciedad y los restos de alimentos. Además, al mojarlo se puede generar más espuma de la aconsejable.

9- No lavar el cepillo al terminar de cepillarnos es claramente perjudicial. La humedad ayuda a la proliferación de bacterias que debemos siempre evitar para una correcta salud bucodental.

10- No cambiar el cepillo periódicamente y cuando está deteriorado es un error grave. Este instrumento, esencial para nuestra higiene bucodental, debe ser reemplazado, al menos cuatro veces al año. Según un estudio del Consejo General de Colegios de Dentistas de España, cada ciudadano solo cambia su cepillo, de media, una vez al año. 

10 errores del cepillado que debes evitar