Todavía no les esperaban, pero algunos de los asistentes al Mobile World Congress hacen noche ya en los hoteles de Barcelona. Este año han adelantado su llegada, de tal manera que cuando arranque el congreso podrán demostrar que han pasado, al menos, 14 días fuera de China. Es una de las medidas que impone la organización para alejar del evento cualquier sospecha del coronavirus. Aunque hay quien sigue pensando que la solución más efectiva es aplazarlo. Es la opinión de Oriol Mitjà, profesor de enfermedades infecciosas, que recuerda que la rápida transmisión del virus hace que en espacios abarrotados en los que hay muchas personas en contacto se incremente la probabilidad de que una persona infecte a otra. Desde la Generalitat, sin embargo, siguen lanzando un mensaje de calma y lo han hecho esta mañana en una reunión de la consellera de Salud, Alba Vergés, con los cónsules. A ellos les han explicado los protocolos de prevención y han recordado que España no es una zona de riesgo.