El PSOE acusa a Barcala de falsificar datos de los sonómetros del centro de Alicante

En el pleno del Ayuntamiento de Alicante celebrado este martes, el PSOE ha puesto sobre la mesa la situación de los medidores de decibelios instalados por el Ayuntamiento. Estos aparatos, colocados en diferentes puntos «conflictivos» del centro de la ciudad, arrojan unas estadísticas que se reflejan en una página web pública, para su consulta por parte de los ciudadanos.

El edil socialista Raúl Ruiz ha planteado una pregunta sobre los dispositivos, y lo ha hecho en el turno de las consultas «in voce», que son aquellas que se formulan de manera oral, sin incluirse en el orden del día, para evitar dar margen de maniobra a los concejales del PP. Allí, ha presentado varias imágenes de algunos de estos aparatos completamente deteriorados, con el micrófono arrancado y quedando únicamente su carcasa.

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Cuando parecía que el fondo de la cuestión se enfocaría en el mal estado o funcionamiento de los distintos dispositivos, Ruiz ha dado un giro a su argumento: «Estas no son carcasas normales», expuso, «sino que son carcasas mágicas porque ellas solas transmiten lecturas de decibelios a la base de datos municipal». Ha tratado de ironizar así el socialista con que el portal de información pública refleje mediciones en aparatos concretos que, según afirma, se encuentran en un estado completamente inservible. 

Error de cálculo

Sin embargo, la intervención de Ruiz, ha dado un segundo giro, en este caso inesperado incluso para él: su tiempo de intervención (cuatro minutos) se ha agotado sin que plantease ninguna pregunta, por lo que el equipo de gobierno no tendrá obligación alguna de responder en el próximo pleno.

Tras la sesión plenaria, el grupo municipal ha denunciado que «se están falseando los resultados que arrojan algunos de los sensores de ruido que tiene instalados el Ayuntamiento de Alicante en diferentes viales de la ciudad». El PSOE recordó además que «los responsables municipales aseguraron en noviembre que los 22 medidores de ruido instalados servirían para recoger datos durante 13 días y, de esta forma, disponer de un diagnóstico con el que poder trabajar». Ahora, casi en el mes de abril, Ruiz afea que nada se sabe «porque Barcala está instalado en el inmovilismo. De hecho, y en relación al casco antiguo, no sabemos cuándo piensan convocar la comisión para avanzar en ese borrador de Plan Zonal de Protección Acústica Especial, que todavía sigue sin definirse». 

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